Iglesia de San Silvestre
Situada en Villares de la Reina y conocida como una de las Catedrales de la Armuña, su construcción se debe a doña Berenguela en el Siglo XII, siendo restaurada en el Siglo XVII por iniciativa del obispo Francisco Hurtado de Mendoza. La iglesia esta construida en silleria de Piedra de Villamayor, tiene una sola nave con bóveda de medio cañón. En la fachada principal se encuentra una puerta con arco romanico coronado por una estatua de San Silvestre. En la fachada norte la puerta también tiene un arco romano pero esta vez está coronado por una imagen de la Virgen. En el interior de la Iglesia destaca la sacristia, obra de Juan Ribero de Rada en 1599, y los once retablos, siendo el retablo mayor de 1676 de estilo churrigeresco.
A lo largo del 2007 la iglesia ha permanecido cerrada al culto debido a una restauración, la cual fianliza en diciembre del 2007 coincidiendo con los actos de la Navidad. Esta restauración que incluía el órgano del templo iba a ser inicialmente por seis meses pero diversos retrasos ha causado que el templo permaneciera cerrado por un año.
