La Universidad de Salamanca (Boletín 107)
La otra mañana, iba yo, por la calle de la Rúa, y me interceptó un matrimonio con dos hijos pequeños: "Por favor, ¿dónde está la rana?" Mucha gente identifica el edificio antiguo de la Universidad con el batracio y la calavera; ya lo predijo Unamuno: "No es lo malo que vean la rana, sino que no vean más que la rana", pero yo creo que no es así, pues, ante su filigrana fina, no se resiste cualquier observador y, mucho menos, el tic de pasmo y asombro que provoca todo el conjunto, además de la rana.
La Universidad tiene su cierne en la medieval escuela catedralicia salmantina, que acogía a los muchachos para instruirlos en las primeras letras, en las cuatro reglas y en la doctrina cristiana. Ya se lee que esta escuela existía en 1130, y que su maestrescuela asistió al concilio de Carrión. Fue, precisamente, Alfonso IX, rey de León, y quien ordenó la repoblación de Macotera y de los pueblos del alfoz de Alba, el fundador del Estudio General de Salamanca, en agosto de 1218, y sin dejar de ser una institución eclesiástica, hasta mediados del siglo XIX. Durante muchos años, todas las actividades de la Universidad tuvieron lugar en el claustro de la Catedral Vieja y, el examen de grado (fin de carrera), tenía lugar en la capilla de Santa Bárbara; en este recinto, la noche anterior al examen, el aspirante a los grados quedaba encerrado, sentado en el sillón, colocado de espaldas al altar y, ante un tablero, en el que posaba los libros, que tenía que repasar durante la noche de vigilia. Si el alumno suspendía, salía "por la puerta de los carros" (trasera del claustro); y si aprobaba, se encaminaba a la gloria del "víctor". La Universidad intentó trasladar la colación de grados a otro sitio, por tratarse de una "capilla oscura, fría e incómoda", pero se siguió utilizando hasta 1843. Fundó esta capilla el obispo Lucero, en 1334, quien se encuentra enterrado bajo la estatua yacente. Este obispo fue quien dio el visto bueno al repudio de doña Blanca de Borbón por Pedro I el Cruel, nada más conocer éste que la dote pactada en el matrimonio, no podía ser pagada.
El claustro de la catedral vieja era pequeño para el empuje que la Universidad iba adquiriendo, y ésta comenzó a dispersarse por la ciudad; algunas de sus cátedras: como la de Leyes, en la calle del Arcediano; la de Gramática, en san Vicente; la de Decretales, en las casas de Cabildo..., hasta que el cardenal Pedro Martínez de Luna (el Papa Luna) ordenó en 1411 la construcción del edificio de las Escuelas Mayores; con ello, se pretende agrupar todo lo que antes estaba disperso; se realizó la obra entre 1415 y 1433; se llevó a cabo una ampliación entre los años 1442/1452, época en la que se levantó el muro de la fachada sobre el que se antepuso el estandarte renacentista, que, hoy, preside la entrada del edificio antiguo de la Universidad. Se desconoce la fecha en que fue labrado, pero existe la certeza que fue entre los años 1513 y 1529.
Vamos a hacer un poco de turismo. Observa el primer cuerpo; con el dedo índice, te indico el lugar de la rana, se encuentra en la cinta de la derecha, según miras, en la parte interna de la pilastra: "la rana posada sobre la calavera". Tú te preguntarás: " ¿Qué significado tendrá la rana colocada sobre la calavera? Según el profesor Cortés, simboliza la lujuria, el pecado de la carne. Además de la rana, la fina filigrana de grutescos no tiene otro objeto que llamar la atención sobre el medallón central, dedicado a los Reyes Católicos, lo bordea una inscripción en griego que dice: "Los Reyes para la Universidad, y ésta para los Reyes".
Preside el segundo cuerpo el escudo de España con toisón, compuesto por el águila real, flanqueado por otros dos con el águila bicéfala, que aluden, claramente, al reinado de Carlos I. En la parte izquierda, aparece un medallón, que contiene la figura de un hombre que algunos Identifican con Hércules, (y otros, con Carlos I), mientras, que, en que se muestra, en el rincón derecho: una mujer se sujeta el pelo con una cinta, se supone sea Herbe, esposa de Hércules (otros creen que se trata de doña Isabel, esposa de Carlos I)
El centro del último cuerpo lo ocupa la representación del Papa, dando instrucciones a unos profesores, acompañados por dos cardenales. Se cree que el Papa es Martín V, que otorgó las treinta y cuatro constituciones, por las que se debía regir la Universidad.
Pero, donde reside el intríngulis de la fachada, entendida como contraposición de la virtud y del vecino, es en dos figuras recuadradas y sus acompañantes: Hércules (a la derecha) representación de la fortaleza y la virtud; al otro lado, Venus simboliza la vida disoluta. Los personajes, que flanquean a Hércules, son Juno y Júpiter; Juno, con las dos serpientes, que envió contra Hércules, hijo de Zeus y Alcmena, para que acabaran con él, celosa de su marido. Venus, la griega Afrodita, con la columna rota, signo de la castidad perdida, escoltada por Baco, coronado de hojas de vid, y su hijo Priamo, incitador al placer. La fachada simboliza la virtud, encarnada en la figura de Hércules; y el vicio, escenificado por la rana, Venus, Baco y su hijo Priamo.
Fuera de la curiosidad, se hallan la leyenda litográfica y escusada de los monos a ambos lados de la fachada, y el obsceno simio de la crestería del patio de fray Luis.
- Artículo publicado en el número 107 del Boletín de la Asociación Cultural "Amigos de Macotera"
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