Simón Roland
El monje francés Simón Roland, fue el descubridor de la imagen de la Virgen de la Peña de Francia.
Según la leyenda habría llegado desde Francia llamado en sueños por la propia Virgen. En ellos la Virgen le llamaba Simón Vela, pues así entendía cuando le decía: Simón, vela y no duermas por lo que el monje decidió cambiar su apellido por el de Simón Vela.
Simón vino a la península peregrinando a Santiago; en el camino oyó a unos carboneros gritar su pregón: Carbón de la Peña de Francia. Entonces Simón lo comprendió, se dirigió a la Peña de Francia, primero a San Martín del Castañar, y desde allí a la Peña de Francia, donde permanecería tres días en el transcurso de los cuales se le aparecería la Virgen de nuevo. En esta visión, la Virgen le indicó donde podía a encontrar su imagen. Entonces bajó a Miranda en busca de ayuda, uno de los hombres que le acompañaban era escribano, y dejó constancia del hallazgo de la imagen el 19 de mayo de 1434. La aparición de la imagen de Nuestra Señora de la Peña de Francia, convirtió el lugar desde entonces en un centro de peregrinación y devoción para los serranos.
El propio Simón, con la ayuda de los serranos, logró construir una capilla para albergar a la virgen, mientras aparecian nuevas imagenes de Santos en las grutas de la zona: Santiago (1439), San Ándres (1440) y la del Santo Cristo (1446).