Historia de Aldeadávila de la Ribera

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Historia de Aldeadávila de la Ribera

Aldeadávila se llamó a comienzos de la repoblación cristiana aldea d'Auila, y se cree que dicho nombre pudo proceder, no tanto de pobladores de Ávila, sino por la Hermandad de los Frates de Ávila que en el último cuarto del siglo XII dominaron desde Aldeadávila hasta Barruecopardo.

Pero Aldeadávila estuvo poblada, según los restos arqueológicos que van apareciendo, al menos desde la Edad del Hierro, como lo prueba el verraco vetton que existió hasta el s.XX entre Masueco y Corporario , las dos estelas romanas aparecidas en Corporario, y los restos de calzada romana de unos 100 metros que se conserva, que se correspondería con el trazado lusitano de la ruta L-5.

Aldeadávila árabe

La abundancia de fuentes en el Barrio histórico de Abajo, las fértiles huertas y un buen clima posibilitó el poblamiento en la época de los árabes. De esta época abundan las leyendas árabes en toda la comarca de las Arribes: en Pereña, Masueco y Aldeadávila, cuyos temas principales son las doncellas, las vírgenes pereseguidas, las fortalezas y las riquezas. De esta época procedería la antigua cerca de Aldeadávila todavía visible hoy entre la ermita de La Santa y la Calle El Berzal, que recorría un perímetro de 820 metros con 5,3 ha, el cultivo del olivo con bancales en la parte central de las Arribes, y la tradición de huertas junto a la Ermita de la Santa.

Aldeadávila medieval

Corporario se ha asociado a enterramientos o Corporales desde antiguo, aunque es posible que se llamara Darios o Corpo-Darios y Aldeadávila fue dominio de la Orden de Santiago, como Barruecopardo, y las aldeas de Ledesma, allá por los años 1172-1190. De esta época pudo proceder la antigua ermita de Santiago, situada en lo alto del pueblo, entre la calle Fuente de Santiago y la Lagona en las cruces en piedra que guardan su recuerdo. En un primer momento la situación es de retaguardia, en la lucha contra los árabes, pero ya con Alfonso X y XI, la situación se invierte y se convierte en Señorío contra los portugueses. Las primitivas aldeas del Concejo de Villa y Tierra de Ledesma, ya tenían en 1265 la suficiente entidad, como para buscar la financiación para la construcción de sus iglesias y ermitas, con el préstamo de la Iglesia-Catedral de Salamanca:

Summa Libro a todos los préstamos que la Yglesia catedral de la Ciudad de Salamanca ha e tiene en la dicha ciudad e en sus tierras e término e en la villa de Ledesma e en su término... los cuales comienzan de la siguiente manera:... Massoco, Sarça de Canosapo, Corporario, Aldeadávila, Mieça, Bilbestre, Barruecopardo... En el siglo XIV ya empiezan diversos despoblados: Penalfange, Simirera, Aveto, Robredo de la Casa. En el entorno de Aldeadávila se tienen localizados algunos: Quadrilleros,Alcornocal, La Revilla de Aldeadávila, Robredo, etc.

Entre los años 1290 y 1322 los infantes Sancho Pérez y su hijo Pedro se disputan al Concejo de Ledesma el señorío de las tierras de las Arribes: Otro sí confirmamos al Concejo de Ledesma que haian sus aldeas que son estas: Penna, Villarino d'Arias, Darios, La cabeza de fuera mercados, Aldea d'Auila, Mieza.., a partir de este momento, los campesinos de las Arribes-La Ribera- empiezan a tener unos mínimos derechos. En esta época Aldeadávila, rodeada por unas cercas de las que se conserva el trazado y unos lienzos junto a la ermita de La Santa está radicada básicamente en el barrio histórico de Abajo, pero ya comienzan a poblarse los Barrios de Peñas y Atalaya. Ver Historia medieval de Aldeadávila

El crecimiento demográfico en el Renacimiento

El Renacimiento también se dejó sentir en estas tierras: las rodas de Masueco y Villarino crecen mucho, pero sobre todo Aldeadávila, con un floreciente comercio y agricultura: 210 vecinos pecheros, y Corporario, dado lo limitado de su territorio, se queda en 49 vecinos. Esto se nota en una gran actividad: se celbran contratos de herencias y compra-venta de fincas, como el realizado por el Bachiller Francisco Bravo con las monjas clarisas en 1501, o la correspondencia del cura-beneficiado de Aldeadávila Licenciado de la Torre con el propio rey Fernando en 1506, a cuenta de desavenencias con el Arcediano de Ledesma. Poco después, ya con Felipe II, la economía cobra un nuevo impulso con las primeras remesas de América, y con la creación en nuestra tierra de los estancos del tabaco, la sal y las especias, en las que se enriquecieron familias de nuestro pueblo, como pudo ser el caso de los Pozo y Caballero, pero también numerosos judíos conversos que regresaron de portugal: éste es el caso de Ana Rodríguez de Paz, Joseph de Paz y tantos otros. Conocemos estos casos porque pronto empiezan las denuncias de los llamados cristianos viejos, que no era tanto un problemas religioso, sino más de rivalidad económica. Estos dos casos que hemos nombrado fueron juzgados por la inquisisción en la Cruz jurisdiccional del Rollo, de esta época también data la costumbre de significar ciertas fachadas con cruces cristianas y símbolos JHDS. Lo que más choca de esta época fue la instalación de 23 familias moriscas en el Barrio histórico de Arriba allá por el año 1589. estas familias se dedicaban fundamentalmente a la agricultura y eran muy pobres, situación que ha quedado marcada en la arquitectura de dicho barrio y de la calle La Sierra con sus construcciones más modestas: sus descendientes necesitaron abrir hasta 4 brechas en las antiguas cercas para poder dedicarse a su actividad. Poco después, en 1605, sabemos que Corporario se ha estancado en 50 vecinos y Aldeadávila aumenta hasta aproximadamente 300, empezando su influencia en la comarca con personajes como Alonso santiago (n.1617), Juan Caballero Heras y Juan Caballero y Santiago (n.1669) padre del 1º Marqués del Caballero. Esta situación de bonanza se sabe aprovechar, y en la segunda mitad del s.XVI se llama a Pedro lanestosa el viejo, quien realiza las trazas de la restauración de la Torre e iglesia de Aldeadávila, así como su ampliación, con el cerramiento de dos puertas románicas, la apertura de la puerta Oeste de la Torre, y la modificación de la Puerta Sur, así como el realce de dos plantas en la Torre. La Obra la terminan finalmente los canteros de Torre de Moncorvo: Pedro martín y Antonio de Govêa. Las guerras, la peste y las hambrunas bajan el valor del suelo agrícola, situación que es aprovechada por el Sr. de la Villa de Sobradillo quien se hace con grandes propiedades agrícolas y urbanas en toda la comarca de La Rivera, dedicándose fundamentalmente al comercio del vino, época de la que se conservan varias bodegas subterráneas muy antiguas en Aldeadávila.

Personajes como Alonso santiago, juan Caballero Heras, y los hermanos Juan y Francisco caballero y santiago fundan la Cofradía de la Vera Cruz, allá donde terminaba el pueblo, y pagaron la construcción de la Ermita del Santo Cristo, encargándose de suministrar al cantero toda la cantería.

Las expectativas del S.XVIII

El siglo XVIII marca claramente un nuevo renacer, gracias al comercio, las remesas de América, y la posesión de tierras en otras aldeas de la comarca, lo que hace que la agricultura y ganadería alcancen máximos históricos... la población se agrupa nuevamente en torno al núcleo de cabecera: Aldea Dávila, y se abandonan para siempre los caseríos de santiago, Revilla, san Marcos, y sus ermitas, derruídas completamente, y hasta lugares como Robledino de Santo Domingo abandonados casi completamente. La Zarza y Corporario se unen al término. Las fortunas de las familias que hemos visto, continúan enriqueciéndose y nacen Gerónimo Manuel Caballero y Vicente del Campoen 1721, y su hermano Pedro Antonio, el primero libra a Carlos IV de perder una pierna en Nápoles y en agradecimiento le concede el título de Marqués del Caballero. Estas familias ricas envían sus hijos al Convento de santa Marina, y al Colegio Seminario de Masueco, destacando después como religiosos en América: los fray Francisco Morales, Antonio Cavallero,Hernández herrera,Joseph Fernando caballero y Miguel caballero del Pozo. Gran parte de estos hombres buscan pertenecer a la Orden de santiago. En 1762, como consecuencia de los acuerdos de familia con francia, se participa en los preparativos de una sorprendente invasión de Portugal, que no se realiza, pero que indica los contactos de la familia con la Corte. Muerto el 1º Marqués del Caballero en 1801, en 1807 se crea el mayorazgo del título pasando a su sobrino Joseph Antonio Caballero y Caballero del Pozo, que se destacó por ser afrancesado, y sucedió a Jovellanos como Ministro, y desarrolló una reforma universitaria y de educación. Esta relación con la postura del partido francés hace que en Aldeadávila se acantonen contingentes franceses, al igual que en los pueblos de la comarca. Aldeadávila, al igual que Vitigudino tienen registradas revueltas contra los franceses, quienes se marcharían destruyendo el tejado de la iglesia y otras construcciones civiles.

En 1798-1800 la Universidad de Salamanca figura cobrando rentas del grano, mostos y del vino en las Cillas de Pereña y de Aldeadávila. La influencia del 1ºmarqués del Caballero es notable, y se construye en 1807 una nueva prisión.

El siglo XIX

De finales del siglo XVIII y comienzos del XIX se observan la mayor parte de las construcciones: se amplían las ermitas (1760-1770), se construye el edificio histórico de la Aduana (1739), el Palacio de los Marqueses (1780-1790), el Palacio del rector de la Universidad de salamanca Manuel caballero del Pozo (1790-1800), la capilla de los marqueses, y sobre todo gran cantidad de edificios antiguos de cantería que todavía se conservan en los barrios históricos, así como se construyen las calles Poza y Rollo a comienzos del s.XIX.

Los reinados de Fernando y de su hija Isabel II no trajeron buenos resultados para el pueblo: a la Desamortización de Mendizábal y la marcha de los padres franciscanos, se unió la pérdida del naciente partido de La Rivera heredero de la vara de castrotorafe en la comarca, en favor de Lumbrales y Vitigudino que continuaron disputándoselo. La Villa entra en un período de adormecimiento, que se nota al leer a Madoz, 1847, pero nuevamente el comercio iba a sacarla de su letargo: consigue autorización para el mercado anual en 1851 -que duró hasta 1970-, logra potenciar su aduana con sucesivas ampliaciones, y en toda la comarca destacan los aprovechamientos forestales de sus montes-Cabezos-.

En este siglo nacen una pléyade de escritores y pensadores: Matilde Cherner y Hernández 1833, José Martín Herrera, Cristóbal Martín de Herrera 1831,Rafael Vicente 1862, Alfonso Hernández Catá 1885, Alejandro Gallego Martín 1895...

Don Miguel de Unamuno, Rector de la Universidad de salamanca visita las Arribes salmantinas, y Aldeadávila entre 1898 y 1902 al menos en dos ocasiones. La visitó como turista, pero sobre todo como naturalista, historiador, etnólogo, escritor, enamorado como estaba de esta tierra, y nos dejó unas brillantes imágenes:

Aldeadávila: la corte de esta región, la villa para los comarcanos... en las desoladas vertientes del Rupinal, cerca del caño de FuenteMendo, dicen que hubo un pueblo y tantas otras bellas citas.

Referencias

Leyendas árabes de las Arribes , Romancero medieval de las Arribes, Cancionero salmantino,El Toro de Aldeadávila,Picón de Felipe,El habla de la Rivera


Bibliografía

Otras fuentes de información